Tumbando Caña

Hilario Osorio

EL EJEMPLO
Hace unos años el estado de Baja California Sur fue sacudido por un mitotazo parecido al que hoy sufre Michoacán: un hermano del gobernador, Víctor Manuel Liceaga, fue encontrado coludido con el narcotráfico, que en aquellos tiempos estaba “virgen” en la entidad peninsular.
Si mal no recordamos, don Víctor no se anduvo por las ramas. Ni tardo ni perezoso mandó detener y recluir en el CERESO a su hermano Agustín, alias “El Tin”, como se llama el susodicho familiar, que amenazaba con hundir la imagen de su administración.
Y, tan, tan…, asunto concluido…., nadie la hizo tanto de tos en su contra.
Eso es lo que en mi ejido llamamos predicar con el ejemplo.

MICHCOACÁN
Ahora Leonel Godoy, gobernador de Michoacán, tiene la oportunidad histórica de hacer lo mismo: simplemente someter a uno de sus hermanos que se anda brincando las trancas conforme los señalamientos públicos, no solo andar haciendo pactos con el diablo para salvar la imagen que le queda.
¿No creen, ustedes, amables lectores?

¡ME RINDO!
En Ahome, la ínsula municipal de “El Chino” Esteban Valenzuela, al fin sucumbió este a las tentaciones de seguir defendiendo a colaboradores vinculados a la corrupción.
Después de sufrir varias quemazones, nuestro alcalde ha decidido tirar la toalla y sacar las manos de la lumbre donde las tenía metidas en defensa de aquellos que lo vienen hundiendo en el excremento social y administrativo.
Pero no lo quería creer…
Bueno, pues, ahí tienen ustedes que veremos trashumar por las calles a los “grandes” despedidos como el director de Salud Pública Municipal, Carlos Silva Valencia, por quien ya despachaba desde hace una quince su colega Ernesto Castro; Ramón Osuna Quevedo, de Desarrollo Social, por quien ya despacha una guasabvense, Claudia Cervantes Leyva, y afinalmente al Secretario José Luis Polo Palafox, quien ha sido cesado de manera fulminante y le buscan sucesor para pasadas las vacaciones.

EN LA PICOTA
Y, como dicen que “las malas noticias nunca vienen solas”, después de las dos primeras corridas de toros, seguía en las miras de la guillotina el Secretario del Ayuntamiento, el José Luis Polo Palafox, por quien se cruzaban apuestas que perdieron los que le metieron a su favor. Había venido resistiendo la exhibidota que le dieron como parte de aquella nómina del narcotráfico, así como la de haber caído de la gracia del chino y de la china quienes lo venían protegiendo a capa y espada gracias al uso de guantes de asbesto.
Últimamente dicen que este Secretario ya no le hacía caso ni a primera dama, mucho menos al alcalde, sus padrinos. ¿Qué le esperaba al cabildo?
Polo Palafox últimamente andaba extraviado. No se presentaba a chambear…nadie sabía dónde andaba.

CERO Y VAN SEIS
Conforme las estadísticas, ya va, mínimo, media docena de ceses colaboradores del alcalde de Ahome, aunque uno de ellos, a decir verdad, puso tierra de por medio, desde febrero pasado, más por dignidad que por otra cosa. Nos referimos al ingeniero Antonio Zamudio, un ex alto funcionario de Petróleos Mexicanos, amigo entrañable del “Chino” quien lo mantenía recluido como segundo de a bordo en Servicios Públicos Municipales. Cuentan que cuando el chino le fue a suplicar que no abandonara el barco a la deriva, “El chapo” Zamudio simplemente le dijo que se iba porque ya no soportaba “sus cochinadas”.

LAS CACHETEADAS
Las otras tres o cuatro personas despedidas con cheque de liquidación a domicilio y toda la cosa, son las mujeres que corrió a cachetadas la primera dama doña Vicky Vega, nuestra “Martita Sahagún” de huarache, con quien el alcalde comparte los poderes oficiales desde su anterior administración….. ¡Ahhh!, y desde luego cuenta también con sus cuñados y familiares, como un tal Fernandito, por ejemplo, quien se ha apoderado de Obras Públicas y Comun. “El Babotas”, le dicen.

EL FOUCHÉ
Dicen pues que en Ahome las influencias están compartidas al interior y al exterior del ayuntamiento, gozando de tales privilegios personajes del pelo de Jaime Hernández, el doctor Felipe Velázquez Zazueta, un hermano de este, Guillermo Velázquez, apodado “El Coné”, parientes muy cercanos del dirigente estatal del PRI, Cenobio Ruiz Zazueta, y, por supuesto el tesorero.
Como en los viejos (y nuevos) tiempos: todo ha seguido quedando en familia.

CON CUIDADO
Al cabildo solamente faltaba ponerse aguzado para que no se les colase más mugre a las filas de la administración. Se oía por ahí que varias pestilencias se habían escapado de las cloacas, para lanzarse como zopilotes tras las vacantes.

¿Y LAS GUARDERÍAS?
Mientras tanto, allá en “Ciudad Gótica”, parece que el asunto de las guarderías ya se ha apaciguado. Todo hace suponer que los y las responsables de la desgracia de Hermosillo ya la han librado gracias a la intervención de sus parientes cercanos, amigos y cómplices en los gobiernos federales, estatal y municipal.
Hay algunos o algunas que están ubicados ya por la INTERPOL en el extranjero, pero lo más seguro es que pase lo mismo que con líder minero que vació las arcas sindicales, dejó en el interior de una mina varios compañeros muertos y se guareció en Canadá. Los Puros mandados le han hecho.

OTRO
No nos crean a nosotros, pero debe haber otro en busca de pomada de las “7 Flores” para ponerse. Y, no precisamente es “El Tin” de BCS el que está en riesgo de perder su chamba y sus canonjías como súper director de promoción económica. Cuentan que se trata de Agustín Jaime Hernández Hernández, otro de los consentidotes del Chino y del tesorero Chale Cota. Ya debe saber de las presiones que vienen ejerciendo en su contra los organismos empresariales, regidores y diputados, que piden también a gritos su cabeza.
¡Eso si no lo verán sus ojos!, nos asegura su casi ex compadre Manuel Sam.