Cani-cani por Juventino Cota Montaño, que apareció, el jueves en el Congreso, como ave de mal agüero. Uy, que mello.
Dice Víctor Octavio que a Pepe Gajón no le ha ido nada mal en el perredismo. Fue Secretario de Marina con Leonel: cuidaba dos barquitos viejos.
Y con Narciso ha sido Secretario del Interior (Protección Civil) y ahora cuida, con singular celo, el lecho de los arroyos.
Dicen que en Semana Mayor veremos a Luis Armando cargando una cruz, rumbo al Cerro Atravesado. ¿Será el mártir del Gólgota?
Por favor, esos jóvenes de secundaria y de prepa, que no anden haciendo el saludo “gobernador”, no sean groseros.
Narciso Agúndez resulto para el PRD lo que Zedillo para el PRI: lo recibieron como gigante y lo entregan como enano. Sin agra...
Pues ya lo vieron. Karim es el nuevo karimñino de Narciso. El viejo sigue siendo Luis Armando.
Dicen que hasta le canta, como Memo Lugo: “...quisiera amarte menos, pero no puedo vida mía. Y si dejo de amarte...”.
Nosotros hacemos cosas a lo grande. Tenemos, no uno, sino quince Judas Iscariotes. Dicen que todavía están contando las monedas.
Dice Víctor Octavio que a Pepe Gajón no le ha ido nada mal en el perredismo. Fue Secretario de Marina con Leonel: cuidaba dos barquitos viejos.
Y con Narciso ha sido Secretario del Interior (Protección Civil) y ahora cuida, con singular celo, el lecho de los arroyos.
Dicen que en Semana Mayor veremos a Luis Armando cargando una cruz, rumbo al Cerro Atravesado. ¿Será el mártir del Gólgota?
Por favor, esos jóvenes de secundaria y de prepa, que no anden haciendo el saludo “gobernador”, no sean groseros.
Narciso Agúndez resulto para el PRD lo que Zedillo para el PRI: lo recibieron como gigante y lo entregan como enano. Sin agra...
Pues ya lo vieron. Karim es el nuevo karimñino de Narciso. El viejo sigue siendo Luis Armando.
Dicen que hasta le canta, como Memo Lugo: “...quisiera amarte menos, pero no puedo vida mía. Y si dejo de amarte...”.
Nosotros hacemos cosas a lo grande. Tenemos, no uno, sino quince Judas Iscariotes. Dicen que todavía están contando las monedas.
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